(Análisis) Donkey Kong Country Returns

Donkey Kong ha vuelto de mano de Retro Studios y está de manera exclusiva en Nintendo Wii con sabor añejo de los Donkey Kong Country realizados por Rare en época de la SuperNintendo.

Se echaba ya en falta que el gorila más famoso en el mundillo de los videojuegos volviera con una aventura protagonizada por él que fuera en 2D, para todos aquellos que crecimos comiendo plátanos, capturando las letras que forman la palabra Kong y moviéndonos por un scroll horizontal de este personaje tan entrañable.

Clásico y actual.

Donkey Kong Country Returns tiene todos los elementos que tenía la saga clásica, pero está renovado con los tiempos que corren.

El juego está dividido en ocho mundos (nueve en caso de cumplir con una serie de requisitos para desbloquearlo) siendo la dificultad siempre creciente y con una curva de aprendizaje correctísima. Cada uno de estos mundos está dividido por una serie de fases que, a su vez, tienen puntos de control para continuar desde ellos en caso de caer derrotado y tras superar todas esas fases nos enfrentaremos a un jefe de zona antes de poder ir al siguiente mundo. Estos enemigos finales son bastante poderosos y cada uno de ellos muere de una manera diferente, por lo que hay que ser cauto y hábil para que no empiecen a descender nuestras vidas a la velocidad de la luz.

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