Para empezar, esta vez la protagonista es Serah (la hermana de Lightining, la anterior protagonista) y es una mujer que en la anterior entrega era un personaje al que no se podía controlar a pesar de que fuera muy importante para la historia y, de hecho, el detonante de que Light decidiera luchar y arriesgar su vida.
A Serah la acompañarán un mogurito y Noel, un personaje nuevo que tiene el papel de chico alegre, lo que vendría a ser por ejemplo Tidus de Final Fantasy X, para no remontarnos demasiado atrás en esta saga de rol y además citar a otro chico.El mogurito, por lo que vimos, es muy importante, ya que gracias a él podremos encontrar diferentes cofres ocultos, podremos tener una u otra arma e incluso usando su «mogu-reloj»se decidirá si pillamos al enemigo por sorpresa, si el combate será en igualdad de condiciones o si será él quien nos sorprenda a nosotros, en cuyo caso le tocará actuar antes y empezaremos cobrando.
Se han mantenido las estrellitas de rango después de superar cada lucha, que es algo que ya vimos en el anterior juego de la saga y, aunque la lucha es prácticamente calcada -las órdenes se dan igual, hay habilidades de varias ranuras, y podemos cambiar de roles (o paradigmas)– ahora hay escenas cinemáticas entre medias con las que a base de QTE podemos beneficiarnos en cierta medida o hacer que cambie sustancialmente algo del combate.