Bethesda nos dio la oportunidad de probar una demo de aproximadamente una hora durante la pasada Gamescom de Dishonored, el juego de acción en primera persona firmado por Arkane Studios y producido por Bethesda que tiene previsto su lanzamiento para principios del próximo mes.
En la demo teníamos que avanzar por una zona hostil, y para ello podíamos elegir entre dos opciones: hacer uso del sigilo o lanzarnos al ataque de todo lo que nos encontremos por delante. Sin duda la primera opción se hace bastante más sencilla aunque tengamos que mirar muy bien los tempos y los movimientos del resto de personajes en el campo de batalla para poder llegar a nuestro destino con número mínimo de enfrentamientos posibles. En caso de decidirnos por la opción de un ataque frontal debemos tener una gran habilidad para manejar al personaje en combate y utilizando todas las herramientas que pone a nuestra disposición el juego. A partir de ahí lo cierto es que no encontramos muchos caminos alternativos y la única decisión que podemos tomar en ese aspecto es la manera de encarar esos caminos.
En la misión que se nos encomendaba llegábamos a una mascarada donde se podía apreciar el esfuerzo de Arkane Studios en el aspecto artístico dotando al juego de una gran calidad en ese aspecto. Este trabajo artístico dota de gran personalidad al juego con un acabado muy oscuro acorde con la historia que nos van a querer contar. Además de en el diseño de la ciudad y toda la arquitectura asociada a este en el diseño de personajes y de la vestimenta que estos llevan se puede ver un trabajo especialmente detallista.
En lo que hemos probado de Dishonored también hemos podido tener acceso al uso de varias de las habilidades sobrenaturales con las que contaremos. Tendremos un árbol de habilidades que ir aprendiendo y mejorando en el apartado más rolero del juego y que debemos tener en cuenta en el modo de encarar a nuestros enemigos, haciendo uso de las habilidades que consideremos oportunas. Aun así, después de probarlo estamos convencidos de que las habilidades sobrenaturales quedarán en un apartado secundario y terminaremos haciendo mucho más uso de nuestra ballesta, a pesar de sus municiones finitas, y nuestra daga.
Como punto negativo nos encontramos con la interfaz del juego en las versiones de consola, debido a las limitaciones del gamepad no tenemos un acceso sencillo al cambio de munición o habilidades en lo que sería el arma secundaria y que creemos debería estar mejorado.