EA sacó el pasado mes de abril el segundo juego de su saga Shift dentro de la franquicia Need For Speed y este juego de conducción que se preveía continuista, nos ha dejado un sabor amargo porque más que ir acelerando o en línea recta hacia algo mejor, ha dado un giro a modo de trompo que hace que no llegue a calar e incluso sí a cansar demasiado rápido, yéndose a toda velocidad a la tierra del olvido.
Bien es cierto que todo es efímero y hasta las grandes joyas muchas veces quedan relegadas más pronto de lo que debieran para dar paso a otro nuevo producto de la industria del entretenimiento, pero Shift II no alcanza las cotas esperadas por los fans de la saga ni a nivel técnico, ni tampoco jugable, aunque por lo menos es una opción para quien quiera jugar online una carrera tras otra o echarse unas cuantas pruebas de drift (derrapes).
En este juego, al igual que sucedía con su predecesor, iremos adquiriendo puntos de experiencia según corramos. Algunos irán simplemente por hacer rebufos, por seguir el trazado ideal o por la posición en la que quedemos en la competición. Otros dependerán de si dominamos las curvas o cumplimos los objetivos que se nos marquen en cada carrera o prueba de derrape.
Sin embargo, al contrario de lo que sucedía en el otro juego, no habrá la opción de que nuestro rango de piloto termine siendo agresivo o de tipo control según nuestras acciones; los coches se controlarán bastante peor, apenas habrá diferencia entre clases e incluso el catálogo del concesionario será muy inferior a lo que estábamos ya acostumbrados. Muchas veces ni siquiera se notarán las mejoras implementadas en el taller y nos dará la sensación de estar tirando por el retrete el dinero que tanto nos cuesta ganar.
Una respuesta a “(Análisis) ‘Need for Speed’ Shift II Unleashed”