(Análisis) Final Fantasy: Theatrhythm

Así pues, una vez contado eso, quien se queje de dificultad, es porque quiere y más si tenemos en cuenta que el juego está pensado para que nos saquemos ya no todas las canciones sin fallar ni una nota, sino dándole en el momento idóneo haciendo un crítico detrás de otro.

El tercero de los modos de juego (Dark Note) es el más complejo de todos e iremos desbloqueando canciones con los puntos de ritmo que vamos acumulando, así como haciendo intercambios por streetpass. Es un modo muy exigente y para él no está de más tirar de todos los elementos roleros del título haciendo que nuestro equipo esté equilibrado, a un buen nivel y con un buen equipamiento. También queremos que sepáis que para este modo siempre tendremos dos canciones de dos de los tres tipos que hay: de campo, de escena y de batalla; yendo por el campo en el primero de los modos y teniendo que seguir el ritmo con un montón de momentos en los que tenemos que dejar pinchado el stylus sobre la táctil para movernos por ondas que requieren que no nos salgamos del camino trazado, o teniendo que esperar al momento adecuado para realizar las diferentes acciones en escena o batalla -viendo vídeos en escena con momentos impactantes de los juegos, escogiendo justo lo más llamativo y que encantará a los fans (aquellos para los que va principalmente destinado esto, no lo olvidemos) o luchando contra enemigos conocidos de cada uno de los títulos en el modo batalla, llegando incluso a invocar a espíritus como Shiva, Ifrit, Bahamut, Ramuh u Odín.

Música y rol, jugosa combinación.

Aunque a primera vista pudiera no parecerlo, ya desde el tutorial se nos deja claro que las stats de los personajes son importantes y que dependiendo del tipo de canción, se tirá más por ejemplo de agilidad y suerte que de fuerza. También se nos recomienda ir con un grupo equilibrado o irlo modificando con habilidades y objetos para que nos resulte todo menos cuesta arriba una vez que queremos tener todas las canciones con el grado máximo o superar las dificultades endemoniadas de algunas de las Dark Note o lo que veremos en el ultradifícil.

Después de cada canción completada, adquiriremos puntos de experiencia y de ritmo y con 10.000 puntos de ritmo nos pasaremos el juego y habremos hecho que la diosa Cosmos venza al malvado Caos una vez más, después de las guerras de Final Fantasy Dissidia. También con los puntos de ritmo iremos desbloqueando más contenidos y es que el cartucho está lleno de extras y recompensas para los fans, de modo que cuanto más jueguen y mejor lo hagan, más chuminadas tendrán por ahí para estar más contentos que unas castañuelas, porque aparte de los modos de juego en sí mismos, tendremos trofeos, teatrillo con todos los vídeos que además podremos ver en 3D y con una calidad muy buena o un reproductor para las canciones de la saga. A todo esto, se le suma un álbum de cromos con imágenes de los personajes por una cara, y una breve explicación y presentación de estos en la contracubierta.

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