Combatiendo por el mundo.
En Trails in the Sky hay lugar a la exploración desde luego que sí. Y es que no siendo bastante con lo de las misiones del gremio y precisamente para que sea mucho más entrenido el hacerlas y nos divirtamos en nuestros viajes, tenemos un mapa muy extenso que recorrer tanto a pata como en los diferentes medios de transporte a los que podremos subirnos en la aventura.
Como los enemigos sueltan cristales que después podemos cambiar por orbes (o venderlos si nos sobran) hay un montón de variedad puesto que cada uno da los cristales de un tipo -viento, aire, oscuridad, luz, fuego, agua, tierra, tiempo…- que luego se corresponderán con las magias que podamos hacer al desbloquear orbes justo del color que se corresponda con cada tipo de hechizo.
Los combates son bastante fluidos y originales, pues mezclan las luchas tácticas con movimiento por cuadrantes con los turnos de toda la vida, anunciándosenos incluso a quién le tocará en cada momento y hasta habiendo en muchas ocasiones efectos ajenos que se nos añadan -o al enemigo- como por ejemplo que golpeemos más fuerte en ese turno, que nos saquemos más cristales o que recibamos una pequeña cura gratuita.
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