El pasado lunes 7 de febrero se celebró en un casino de Las Vegas una fiesta promocional del juego más gamberro del año, Duke Nukem Forever y por supuesto, el Rey necesitaba celebrarlo en un ambiente igual de cachondo con strippears como azafatas de la demo que pusieron a disposición para la prensa americana por parte de Gearbox.
Aunque dudamos de si realmente esos periodistas estaban concentrados jugando a la demo mientras preciosas chicas les observaban a menos de un metro, lo que está claro es que Duke Nukem Forever no es ninguna utopía, es real y el desarrollo parece ir viento en popa; y es que la locura que emanan las imágenes aseguran por lo menos, diversión. En mayo, si no sucede ningún retraso, lo sabremos.
Ojo a la captura de Duke firmando su libro autobiográfico «Por qué soy tan genial».