Tras dos aventuras salvando Gamindustri, la tercera entrega de la saga Neptunia vuelve a reunir a las CPUs para ofrecernos la experiencia definitiva de Neptune y compañía en Steam y PS Vita gracias a Idea Factory y Compile Heart, superando con creces a sus antecesoras con Re;Birth 3: V Generation.
Para conocer la evolución de la franquicia es conveniente leer las reseñas de la primera y segunda entrega si no las habéis jugado, pues en esta reseña nos centraremos en las novedades. La historia es una secuela directa de Re;Birth 2: Sisters Generation, con Gamindustri disfrutando de la paz tras la derrota de Arfoire y sus secuaces que intentaban consolidar la piratería y debilitar a las CPUs. Sin embargo, la tranquilidad no durará mucho cuando Neptune acabe accidentalmente en una dimensión paralela muy similar a la suya donde se encontrará con otras versiones de sus amigas y conocidas, así como con Plutia, la despistada CPU de Planeptune de aquel mundo. ¿Podrá nuestra protagonista volver a casa?
La saga siempre se ha caracterizado por ofrecer un argumento lleno de humor, parodias y referencias al mundo de los videojuegos. Después de la decepción que fue la segunda entrega en ese aspecto, con una trama y personajes más planos, serios y aburridos, V Generation consigue desde el primer momento un nivel altísimo de comedia donde nunca pasan más de 10 segundos sin un gag, un chascarrillo o un diálogo delirante. Los recursos que utiliza son innumerables, incluyendo comentarios muy meta donde se ríen de los clichés y estereotipos de los JRPG, rompiendo la cuarta pared con gracia y siendo conscientes de que se encuentran en un videojuego, conociendo la necesidad de hacer algunas cosas para activar eventos, hacer avanzar la trama y dar la importancia que se merece a las protagonistas. Además, también se ríe de sí misma, vapuleando a Nepgear y recordando que era una protagonista muy genérica y sin personalidad en el anterior juego, pero consiguiendo dar una vuelta de tuerca brillante otorgándole un gag recurrente.
La industria de los videojuegos no se libra del ácido objetivo de los diálogos, mucho más evidente en esta entrega que en las anteriores, presentando a Blanc (representación de Nintendo) como una CPU chapada a la antigua que se niega a avanzar regodeándose en su posición de dominio (aunque a veces no tenga mucha idea de la actualidad, creando cierto cacharro rojo que provocaba dolor de cabeza a sus compradores), a Noire (representación de PlayStation) como la más activa y emprendedora pero muy orgullosa y algo ingenua (incluyendo un ataque hacker a su nación), a Vert (representación de Xbox) como alguien que se preocupa del tamaño y la potencia pero descuida todo lo demás y Neptune, Plutia y Nepgear (representación de Sega) como vagas redomadas que se despistan enseguida y crean aberraciones como una consola que se monta sobre una infinidad de add-ons creando un caos de cables. Las puyas siempre se realizan desde el cariño pero en ocasiones son ciertamente ácidas e hirientes, representando tanto los momentos más inspirados como los más patéticos de la historia de los videojuegos. También hay críticas feroces a algunos aspectos de la industria, especialmente los juegos sociales para móviles, aunque también hay hueco para los remakes, los DLCs y las tretas para robar clientes entre compañías. Además, en esta ocasión se incorpora como novedad Peashy, representación del PC con su potencia y versatilidad.
De esta forma, la historia y los diálogos son un auténtico gozo, manteniendo un gran nivel constantemente, con una química excelente entre todos los personajes, con un ritmo y una naturalidad geniales convirtiéndose en uno de los mejores videojuegos cómicos a nivel argumental. Las nuevas incorporaciones consiguen estar a la altura, especialmente Plutia, una protagonista entrañable y divertida que se complementa perfectamente con las demás y ofrece algunos de los mejores momentos del argumento. Incluso la historia principal, que no es más una excusa para la sucesión de números cómicos, está mejor desarrollada que en los dos primeros juegos, con un concepto interesante que se permite algún momento emocionante.
El apartado gráfico aumenta el nivel de anteriores entregas con modelos y escenarios más pulidos con mayor nivel de detalles y efectos especiales pero con animaciones limitadas y muy poca variedad de mazmorras, repitiendo una y otra vez los mismos diseños, algo que se aplica también a los enemigos, desluciendo el conjunto. En PC contamos con varias opciones gráficas y una mucho mejor optimización, funcionando con mayor fluidez con parámetros altos en ordenadores modestos. El diseño visual y de menús sufre un cambio radical pasando a uno mucho más atractivo, colorido y práctico, un auténtico dulce para la vista digno de mención. Los nuevos diseños de personajes también lucen muy bien, renovando el vestuario de gran parte de la galería de personajes con acierto.
El apartado sonoro ha sido otra de las grandes virtudes de los Neptunia gracias al excelente reparto de actrices de voz, incluyendo a muchas de las grandes estrellas del doblaje japonés. En esta entrega regresan Rie Tanaka, Asami Imai, Kana Asumi, Rina Sato, Kama Ueda, Yui Horie, Eri Kitamura, Kaori Ishihara y Yui Ogura; a las que se unen Kana Hanazawa (Akane en Psycho-Pass, Marie en Persona 4 Golden, Mayuri en Steins;Gate, Kuroneko en Oreimo) como Plutia, Aoi Yuuki (Madoka en Madoka Magica, Noa en Yamada-kun and the Seven Witches, Victorique en Gosick) como Peashy y Yu Kobayashi (Sasha en Ataque a los titanes, Mariya en Maria Holic, Ruka en Steins;Gate) como Rei, entre otros. Todo un all-star que rinde a gran nivel, dando mucha personalidad y energía a sus personajes, clavando los números cómicos y contribuyendo de forma decisiva al éxito del humor presente en el juego. La actuación de Hanazawa como Plutia es especialmente brillante, dominando a la perfección la voz somnolienta y lenta del personaje para cambiar de registro cuando está enfadada o se convierte en Iris Heart. La música ofrece pocas novedades con respecto a las anteriores entregas, con melodías bailables, épicas o juguetonas según corresponda, aunque sin mucha variedad, por lo que acabaremos más que acostumbrados a ciertos temas que se repiten una y otra vez.
La jugabilidad ofrece varias novedades. Se mantiene el esquema de escenas de la historia con ilustraciones animadas de los personajes en fondos fijos y cajas de texto junto a la exploración de mazmorras, muy similares las unas a las otras con exactamente la misma estructura, reutilizando una y otra vez los mismos recursos, de forma que todas las que se sitúan en un bosque son iguales entre sí, por ejemplo. Sin embargo, el mapamundi es mayor, con uno general y otro específico para cada nación, lo que ofrece mucho espacio para más mazmorras, ciudades y lugares de interés, añadiendo islas dedicadas a los ordenadores y a los móviles. El sistema de detección de tesoros en las mazmorras ha cambiado, pasando de ese especie de sónar para detectar objetos ocultos a uno más visual y práctico con cajas semitransparentes similares a las de Super Mario cuyas recompensas se obtienen golpeándolas con la cabeza cual fontanero italiano.
El combate por turnos ofrece tres cambios significativos. En primer lugar, la barra de SP y la de EXE Drive se unen en una sola, por lo que añade un nuevo factor estratégico con el que tenemos que gestionar mejor nuestros ataques especiales y magias para no consumir rápidamente nuestros puntos de habilidad. De esta manera también se elimina el tedio de tener que rellenar el EXE Drive desde 0 cada vez que entramos en una nueva mazmorra, con la posibilidad de recuperar nuestros SP atacando a nuestros enemigos o recibiendo daño, añadiendo mucho más dinamismo a los combates. Una segunda novedad es la posibilidad de incorporar un quinto espacio de combos a través del sistema Remake, añadiendo más posibilidades a nuestros ataques. Por último, existen diferentes retos que nos otorgarán aumentos en nuestros parámetros si cumplimos ciertos requisitos, como ganar sin recibir daño, participar en combates, curarnos un determinado número de puntos, provocar daño o saltar en las mazmorras, lo que incentiva enormemente a la hora de enfrentarnos a los enemigos, a pesar de que el sistema sigue desaprovechando su potencial teniendo en cuenta todas las posibilidades que ofrece, pero consigue minimizar el tedio que podía aparecer en las dos primeras entregas.
El sistema Remake también se ha potenciado, añadiendo planes mucho más interesantes para cambiar nuestra partida, con opciones ya presentes anteriormente como cambiar la dificultad, añadir mazmorras y crear armas y objetos así como aumentos de parámetros de nuestros personajes u otras más divertidas. El continuo descubrimiento de planes incentiva mucho a explorar mazmorras, combatir y realizar recados del Gremio, personalizando el juego a nuestro antojo. Es cierto que las aventuras secundarias siguen siendo igual de repetitivas pero, en esta ocasión, las recompensas son mucho más numerosas y jugosas. También hace su primera aparación Neptstation, un programa televisivo presentado por las protagonistas que nos ofrecen sketches, una teletienda donde comprar objetos a precios reducidos y un concurso de preguntas y respuestas para ganar recompensas.
El minijuego Stella’s ☆ Dungeon que debutó en Sisters Generation regresa con un nuevo diseño mucho más atractivo y práctico como el del resto de menús y ventanas, añadiendo novedades a este rogue-like donde mandamos a la citada Stella a través de una torre de 20 pisos para encontrar tesoros, objetos y planes que podemos utilizar tanto en el propio minijuego como en el juego principal y que se desarrolla en segundo plano incluso cuando el PC o la consola están apagados. En esta ocasión podemos hacer que un personaje acompañe a Stella para ayudarla en su aventura, cada uno ofreciendo beneficios distintos y cuyo nivel de observación (ratio de aparición de objetos) aumenta cuanto más los utilicemos, consiguiendo nuevos a medida que conquistemos niveles de la torre. Es un gran método para conseguir materiales raros y planes para cambiar mazmorras, por lo que tiene una incidencia importante en el juego principal y motiva estar atento a Stella, siendo mucho más que una mera aportación anecdótica.
La duración vuelve a estar ligada a la ruta de la historia que consigamos desbloquear, terminando el juego tras los siete primeros capítulos si llegamos al final normal pero aumentando a 10 episodios si alcanzamos el final bueno o verdadero, con unos requisitos menos complicados que anteriores juegos. Así, con la primera opción podemos invertir un mínimo de 25-30 horas, mientras que en la segunda alcanza las 40. La dificultad del juego ha disminuido con respecto a las anteriores entregas, influida también por la cantidad de planes disponibles para facilitar nuestra aventura, algo que minimiza el grindeo de forma significativa y evita la aparición de muros infranqueables en forma de enemigos finales mucho más poderosos que nuestro grupo a pesar de que hayamos combatido con frecuencia. Si bien este factor es positivo para una curva de dificultad más constante y regular, para algunos de los jugadores más dedicados puede ser un juego fácil.
7,5
Conclusiones:
Hyperdimension Neptunia Re;Birth 3: V Generation es el mejor juego de la franquicia con diferencia. La historia, los personajes y el doblaje siguen a un nivel excelente con diálogos delirantes, un humor desatado y brillante y guiños y parodias constantes. Se han pulido muchos de los defectos, con novedades positivas en el sistema de combate, la exploración de mazmorras, el sistema Remake, Nepstation o Stella’s ☆ Dungeon, así como un lavado de cara muy acertado en el diseño visual. Aún mantiene algunos factores negativos, como la reutilización excesiva de recursos o la repetitividad de aventuras secundarias y luchas pero los incentivos presentes ofrecen una experiencia mucho más divertida e interesante que motiva a jugar sin descanso.
Una respuesta a “[Análisis] Hyperdimension Neptunia Re;Birth 3: V Generation”