Hell Yeah! La furia del conejo muerto es un juego arcade creado por los franceses Arkedo Studio (Big Bang Mini, Arkedo Series) que ha salido en formato descargable para PlayStation 3, PC y Xbox 360 gracias a Sega que han estado apoyando el proyecto y metidos en el ajo desde que vieron los primeros artworks con un conejito que parecía sacado de Los caballeros de la mesa cuadrada, en la que los Monty Python hablaban de un pobre conejito, en apariencia inofensivo, pero que era un letal asesino.
Con mucho plataformeo, distintas formas de matar y un laberinto que a veces puede recordarnos a los de Castlevania (aunque el estilo de juego sea completamente distinto) nuestro conejito nos enseñará que puede ser todo un coqueto de lo más glamuroso y que no hay nada como hacerse transfusiones sanguíneas siempre que sea necesario, para que él pueda llevar a cabo su venganza, que es lo que le hace salir de su castillo y decidir que va a armar unas escabechinas que ni en La Matanza de Texas.
¿Conejo al ajillo? ¡Ja!
Uno puede pensar que un conejito tan mono como el de Hell Yeah! es adorable y más cuando descubre que tiene pinta de ser un ñoño de lo más moñas porque le gustan las cosas bonitas y agradables y hasta tiene una extraña filia con los patitos, pero en realidad su furia e instinto de asesino son más del estilo de Yojimbo e incluso los hay que dicen sentir más miedo que si Farruquito coge un coche sin carnet con unas copas de más.
Desde luego, si alguien quiere tomarse un conejo al ajillo o echarlo en la paella, puede que lo tenga incluso más fácil con Bugs Bunny o Roger Rabbit y eso que de tontos no tienen un pelo y a ver quién consigue agarrarlos del pescuezo para echarlos a la olla. Pero al menos, ellos no van armados hasta los dientes ni se saben mil y una torturas para antes de matar salvajemente a nadie.