(Análisis) Call of Duty: Modern Warfare 3

Pero quizás el cambio más grande del multijugador sean las recompensas, pudiendo escoger de tres tipos: asalto, apoyo y especialista. Algunas recompensas son exclusivas del modo asalto o del modo apoyo, y las que están en ambos tienen precios diferentes. Por ejemplo con el tipo de recompensas de asalto un radar cuesta tres muertes seguidas, mientras que en el de apoyo cuesta cuatro muertes.

La diferencia más importante es que con apoyo no hace falta que las muertes sean seguidas, es decir, sin morir, por lo que se puede centrar el jugador en no ir tanto a por el enemigo y ayudar más. También, para reforzar más la idea de la importancia de los objetivos, plantar bombas, capturar puntos y demás también cuenta como «una baja» en el contador para obtener recompensas.

Las recompensas son muy variadas, yendo desde un radar o un paquete trampa a chalecos antibalas, un barrido de helicópteros o un traje de juggernaut.

El tipo de recompensas especialista va por cuenta propia, ya que no se obtienen premios para pedir, sino que se consiguen ventajas. Por ejemplo con tres muertes seguidas se obtiene una ventaja para correr más y para resistencia a explosivos, con cinco también invisibilidad al radar y recarga rápida, y así sucesivamente hasta que el jugador muere.

Hablando de ventajas, estas se han remodelado, eliminado y añadido nuevas con respecto a otras entregas. En Modern Warfare 3 se ha limitado en gran manera la importancia de las ventajas, por lo que la habilidad del jugador será lo más determinante a la hora de jugar. No pasaba lo mismo en Modern Warfare 2 y Black Ops, donde estas ventajas suponían una gran diferencia en las partidas.

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