Una linealidad que se nota sobretodo en los escenarios, que no dejan de ser simples y casi siempre se reducen a seguir recto. Lo mismo ocurre en las ciudades, demasiado grandes para lo que ofrecen, pudiendo estar minutos caminando para atravesar un pueblecito que no tiene más que un lugar donde comprar y vender objetos y un par de misiones.
Estas misiones secundarias alargan considerablemente la duración de Dungeon Siege III, pudiendo llegar a superar las 10 horas de juego, aunque la linealidad de la trama no invita a la rejugabilidad.
El apartado sonoro del título es bueno, y acompaña con el ambiente y el estilo del título. Y aunque las animaciones ingame dejan bastante que desear, el apartado visual en general es bueno, con buenas ilustraciones, menús elegantes y escenarios detallados.
6,7
Conclusiones:
En definitiva, Dungeon Siege III es un juego ambicioso e interesante, largo y muy entretenido de jugar, sobretodo en el modo multijugador. Su mayor problema es que le falta variedad de habilidades para ser un buen juego de acción, y le sobra linealidad para ser un buen juego de rol, pero como action RPG, cumple.
Una respuesta a “(Análisis) Dungeon Siege III”