Como podéis ver las mejoras con los nuevos ataques son considerables y hacen que la jugabilidad se mucho más profunda pero el equipo de Omega Force no se ha querido quedar solo con eso y por ello ha querido solucionar uno de los problemas más graves con los que contaba el juego. Una de las características de los Dynasty Warriors es la gran cantidad de personajes jugables que nos podemos encontrar, sin embargo, exceptuado los ataques musou que sí son únicos, muchos de los personajes eran casi clónicos y el intento de solucionar esto dándonos la oportunidad de cambiar entre armas y escoger el sistema de combate que más nos guste en Dynasty Warriors 7 no terminó por solucionar el problema ya que lo que teníamos era también muchas armas clónicas. En esta edición se lo han currado de verdad y ninguna de los montones de armas que hay es igual a otra, todas tienen ataques distintos, animaciones distintas y por lo tanto ningún personaje se manejará igual que otro. De este modo el juego se hace realmente inmenso y se soluciona uno de los problemas más grandes de la franquicia a lo largo de la historia y que seguramente también afectará a sus spin off en futuras entregas.
El juego también recupera la dificultad de antiguas entregas, pero permitiéndonos en todo momento aumentar o rebajar la dificultad para que se adecué a nuestras habilidades. También recuperamos al antiguo Lu Bu, que era reconocido como el guerrero más fuerte de China en la era de los tres reinos y que en las primeras entregas del juego era todo un hueso que nos lo ponía muy difícil a la hora de enfrentarnos a él.
El sistema de habilidades funciona también de un modo distinto en Dynastry Warriors 8 de modo que las nuevas skill se irán desbloqueando y subiendo de nivel según nuestro estilo de juego aunque después tengamos libertad para utilizar la que prefiramos. La barra de vida y de musou también mejorará automáticamente a medida que subamos de nivel y también se desbloqueará de ese mismo modo los nuevos combos y los distintos musou.
Volviendo a revivir el Romance de los tres reinos
Dynasty Warriors bebe directamente de la novela histórica china Romance de los tres reinos que narra la era encuadrada entre la caída de la Dinastía Han y la reunificación de China por parte de la Dinastía Jin. Entre esos dos acontecimientos históricos se sucedieron las guerras por hacerse con el poder de China y nacieron tres reinos gobernado cada uno de ellos por una dinastía, Wei, Shu y Wu. En el modo historia de todos los Dynasty Warriors se narra esta historia vista desde el punto de vista de cada uno de los tres reinos desde La rebelión de los turbantes amarillos hasta la caída de los reinos y, desde Dynasty Warriors 7, hasta el nacimiento de la Dinastía Jin que terminaría reunificando la China del siglo III.
En esta octava entrega el modo historia está ligeramente cambiado y además los campos de batalla han mejorado considerablemente con una carga mayor de enemigos y que nos permiten usar estrategias mejores para poder afrontarlas especialmente al jugar a niveles altos de dificultad. En cuanto a la narración de la historia podemos encontrar con facilidad las diferencias con respecto a juegos anteriores y la calidad de la animación en las escenas de CG ha mejorado muchísimo mostrando la expresividad de los personajes de un modo mucho más realista y acorde al momento que viven.
Otra de las inclusiones a este modo historia son una amplia cantidad de fases alternativas que nos muestras lo que hubiese sucedido si la historia fuese de otro modo y que ayudan a dar un soplo de aire fresco en un juego que cuenta con grandes cambios y además un modo que representa un gran alternativa al modo historia como es el modo ambición.
Como también viene sucediendo en las otras entregas de Dynasty Warriors todas los personajes y todos los escenarios que vayamos desbloqueando en el modo historia podrán ser utilizados en el modo libre en el que podremos tomar parte en las batallas con el personaje que más nos guste y en el bando que prefiramos.
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