Este modo de juego también es jugable en cooperativo tanto online como local y solo que tendremos que realizar la primera batalla para poder reclutar un general con el que pueda participar en la batalla un compañero.
En el cooperativo online podremos visitar los Tongquetai de otros jugadores y desde luego es una experiencia imperdible teniendo en cuenta lo activa que es la comunidad europea del juego en especial a pesar de que en occidente no cuenta con el apoyo de las grandes masas.
Técnicamente mejorable.
Dynasty Warriors 8 pide a gritos la nueva generación de consolas, una maquina que pueda soportar toda esa cantidad de enemigos en pantalla que necesita el juego evitando el popping que ya se venía viendo en el las últimas entregas de la saga y que se hace exagerado cuando jugamos en cooperativo a pantalla partida en la misma consola. Como decimos esto es algo que venimos criticando desde 
Dynasty Warriors 7 y que también sufría Warriors Orochi 3 y tampoco es algo exclusivo de los musou pero en esta ocasión se ve acentuado quizás por la mayor cantidad de enemigos que tenemos en cada fase y la mayor carga poligonal. También es curioso que el equipo de Omega Force no haya mejorado en este aspecto del juego teniendo en cuenta que conocen muy bien la maquina con la que están trabajando teniendo en cuenta la amplia cantidad de juegos que han desarrollado para Xbox 360 y especialmente PS3.
En Xbox 360 no se libra de los errores y ademas ve acrecentado sus problemas con unas caídas de framerate muy molestas que Tecmo Koei ha prometido corregir con un parche pero que no deberían estar ahí desde un principio y que únicamente se entienden por ser un port de la versión de PS3.
Seguramente después de esta entrega aún nos esperen las dos expansiones habituales DW Xtreme Legends y DW Empires que aún ampliarán mucho más la experiencia de Dynasty Warriors 8 y si el plan de lanzamientos coincide con el de Dynasty Warriors 7 veremos al menos en PS3.
9.0
Conclusiones:
Dynasty Warriors 8 es una de las mejores entregas de la saga que hemos podido disfrutar y que da un salto de calidad en cuanto a jugabilidad para despedirse de la actual generación de consolas por la puerta grande. Además cuenta con un nuevo modo de juego: Ambición, que nos permite disfrutar muchísimas más horas en lo que es un juego de por sí largo, ampliando las características roleras del juego. Por desgracia no está exento de los errores técnicos que ya se iban viendo en entregas anteriores y que estropean en cierta medida la experiencia del multijugador local.
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