En Kana: my little sister, todo gira en torno a la posible relación incestuosa que puede darse o no (según la ruta) y que a pesar de tener algún que otro cliché en la historia usado en varios anime, manga y novelas, termina teniendo una narración muy buena en la que todo está muy bien hilado y hasta el más pequeño detalle acaba resultando significativo. También, los momentos dramáticos son bastante tristes y debemos decir que hay varios ya que unos cuantos personajes se enfrentan a enfermedades, otros a amores no correspondidos de lo más puro… y en el fondo, se ve que por más que cada uno se ponga su máscara y siga su día a día, nadie es plenamente feliz o, al menos, no lo es sin luchar como un auténtico guerrero.
En el caso de los juegos de este género, es muy habitual que haya unas cuantas rutas y en el caso de Kana: my little sister tenemos seis, obteniendo con los dos primeros dos finales sobre nuestra hermana, con el tercero uno sobre Yumi (una chica muy importante durante todo el texto) y los tres últimos se llaman finales intelectuales, consiguiendo con el quinto o el sexto un epílogo a pesar de no ser considerados el final verdadero por la desarrolladora. Aun así, cada uno de sus finales es bastante distinto a pesar de que algunos comiencen de una forma parecida y todos ellos son bastante memorables, además de que, al contrario de lo visto en otros juegos, no nos costará demasiado ir de una ruta a otra en las partidas extras, utilizando por supuesto -como es habitual en estos casos- el recurso de pasar rápido las escenas ya leídas y volcarnos de lleno en todas las inéditas.
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