El viernes salió a la venta Mario Tennis Open, la vuelta de Mario a las pistas de tenis en consola portátil con un título muy centrado en el multijugador y que ha dejado atrás ese modo de rpg que pudimos ver en GBA o los supertiros y superdefensas del de Gamecube, cambiándose ahora por magias más moderadas en cuanto a potencia, pero que se pueden hacer mucho más de continuo.
Centrado en el multijugador.
Si muchos se compraron Mario Kart 7 hace unos meses y no se despegan de la consola gracias al multijugador y al sistema de comunidades, en Mario Tennis Open probablemente suceda lo mismo en cuanto que descubráis lo centrado que está en partidas rápidas o torneos contra amigos.
El online irá muy fluido y nos encontrará rivales en lo que dura un chasquido, además, podemos echar partidas a dobles o en solitario, lo cual está muy bien por si quedamos con varios amigos y queremos estar todos en la misma sala.
Sin embargo, y puesto que no todo el mundo tiene acceso siempre a una conexión de internet y además estamos hablando de que ha salido para 3DS que es una portátil bastante social con eso del streetpass, haremos uso de esa opción de cruce pasivo y se nos quedarán registrados los jugadores de aquellas personas con las que nos encontremos por la calle, simulándose después su estilo de juego y pudiéndonos enfrentar a ellos para practicar, más allá de las propias opciones de torneos y minijuegos que hay en el cartucho.
Por otro lado, se nos permite usar el sistema de descarga 3DS para invitar a hasta tres amigos a una partida y enfrentarnos así entre nosotros aunque solamente uno tenga su cartucho en la consola. Esto es una opción muy buena para cuando uno está con más gente. La única pega que tendrán los que no tengan su propio juego es que estarán con un personaje invitado y no tendrán su ficha de jugador (lógico).
Una respuesta a “(Análisis) Mario Tennis Open”