La Torre de los Retos también es un modo muy interesante. En dicha modalidad nos esperan 300 retos de dificultad progresiva. En algunos de ellos no podremos cubrirnos, o no podremos usar más que patadas. En otros tendremos que eliminar a cierto número de objetivos usando magias, como si de un beat’em up se tratase… En este modo además hay cuatro subtipos de pruebas, que son las de Golpeo, Suerte, Fuerza y Reflejos. Cabe decir que, efectivamente, la más frustrante es la de Suerte dado que resulta totalmente aleatoria.
Vuelve el modo Arcade con estética de torre ascendente, en el que nos enfrentaremos con 9 enemigos hasta acabar jugándonos los cuartos con el mismísimo malo malísimo, el Emperador Shao Kahn.
Tras cada combate seremos recompensados con monedas que podremos gastar en la Kripta, donde podremos desbloquear jugosos extras (nuevos trajes, personajes, nuevos movimientos incluidos fatalitys, hay toda una infinidad. Aquellos que quieran desbloquear el 100% del juego tienen por delante una ardua tarea.
El modo online también resulta muy entretenido. Hasta el momento hemos podido comprobar cómo hay algunos pequeños y aislados problemas de estabilidad, aunque no por ello desmerecen el conjunto.
En resumen: Mortal Kombat ofrece horas y horas de ocio, llegando a ser uno de los juegos de lucha más longevos de los vistos en la actual generación.
8,5
Conclusiones:
Divertido, sangriento y repleto de opciones. Mortal Kombat vuelve a sus orígenes de forma sobresaliente, resultando un juego de lucha completo que tener en cuenta.
Una respuesta a “(Análisis) Mortal Kombat”