Tirando mucho de intentar sacar dinero o materiales de donde sea, y viéndonos obligados incluso a revisitar plantas en ciertos momentos en que veamos que la cosa está demasiado complicada con algún que otro enemigo, nos encontramos con un rpg de acción bastante dungeon crawler, pero con la presión siempre de que no puedes estar en una mazmorra para siempre, por una parte, porque los bolsillos no son infinitos y por otra, porque ante todo, la misión que tenemos es la de cuidar a Helena y tendremos que llevarle carne (de distintas propiedades incluso entre siervos) para seguir un poco a nuestra bola si queremos seguir subiendo de nivel o consiguiendo objetos para que Mavda trabaje sobre ellos o nos los compre.
Gráficamente estamos ante un juego muy currado en los diseños de personajes y monstruos, pero sobre todo en los de mapeado, teniendo unas mazmorras que son auténticamente una maravilla con un montón de detalles, a pesar de que la capacidad gráfica -técnicamente hablando- de Wii no es para tirar cohetes ni mucho menos, pero sí que es destacable por ejemplo cada ascensor, cada puerta, cada cornisa, o cada pequeño elemento decorativo en las decenas de salas que visitaremos.
Si este es uno de esos juegos con una trama emocional, es decir, un argumento de aúpa con un gran peso, le acompañan no solo esos gráficos antes citados o su fluida jugabilidad con la que seremos capaces de hacer un montón de cosas simplemente con un par de botones y el cursor del Wii-mote, sino que todo estará acompañado de piezas musicales clásicas de Mozart, Chopin o Tchaikovsky, ligeramente modificadas, pero igual de melódicas, intensas y vibrantes, metiéndosenos en la cabeza mientras Aeron, desesperado, utiliza sus objetos de cura tras recibir un golpe casi mortal o piensa en cómo derrotar a un enemigo al que hace cosquillas. Aeron desde nuestras manos y nuestra cabeza, por supuesto, porque nos meteremos tanto en el papel, que nos creeremos que de verdad somos ese valiente héroe de la aventura.
9,5
Conclusiones:
Una maldición se pone en medio del ferviente amor de Aeron y Helena y nos mete en toda una epopeya dramática, en una aventura endemoniada en la que escucharemos música clásica no precisamente celestial y que nos provoque calma, sino que nos desasosiegue y nos meta prisa por salvar a la persona amada llevándole carne de las bestias que custodia cada una de las torres del misterioso Pandora's Tower, un rpg muy aventurero de Wii que nadie debería perderse.