(Análisis) Tekken Hybrid

Tekken Tag Tournament, el juego de lucha con equipos de dos jugadores y modo tag -del que ha bebido mucho Street Fighter X Tekken nos ha llegado tal cual, tanto que apenas se le nota mejoría gráfica y además lo tenemos en 4:3 en lugar de 16:9 y con todos los personajes ya desbloqueados desde el principio, por lo que nos ahorramos el tener que pasárnoslo tropecientas veces, aunque parte de la gracia siempre ha residido en ir sacando a los personajes poco a poco, por más que últimamente parece que ya ese paso no exista y nos quede todo dado de primeras.  Tekken Bowl con sus jugadores diestros o zurdos, modo de supervivencia, modo por tiempo, modo arcade, modo por equipos… lo mismo que teníamos en Ps2 lo tenemos ahora, pero con trofeos, porque tampoco hay un modo online, que sí es algo que para hoy día se agradecería bastante. En este sentido, el plato fuerte no es demasiado apetitoso y se queda un poco corto para lo que se esperaba de él.

La demo incluye a Xiaoyu, Alisa, Devil Jin y Devil Kazuya, cada uno de ellos con dos vestimentas y pudiendo jugar contra otro amigo o hacer un minimodo arcade a cuatro pantallas con varias combinaciones posibles, para así probar los diferentes combos de esos personajes, ver sus modelados en 3D y aprender a hacer diferentes cambios y no simplemente el normal de cuando te ves con poca vida hacer que entre el de reserva.

Teniendo en cuenta que Tekken Tag Tournament es igual a la versión de PS2 salvo por no tener que desbloquear a los personajes, a quien le gustara el anterior y prefiera tenerlo en la Ps3, ahí está. Pero para los que no lo jugaron en su día y ya han probado cómo de fluidos van Tekken 5 y Tekken 6, ése les resultará algo ortopédico, y más si lo comparan precisamente con la demo de lo que será Tekken Tag Tournament 2. Del mismo modo, la gracia de la película es más para gente que ya conozca Tekken, que para alguien que no tiene ni idea de quién es Jin Kazama o Heihachi Mishima.