El jueves estuvimos en una presentación del nuevo rpg protagonizado por Mario y que saldrá el próximo 7 de diciembre a la venta para Nintendo 3DS. Esta vez nos dejamos arrinconado a Luigi para ir solamente con el fontanero rechoncho, no hay tándem, solamente una estrella que deberá recoger pegatinas y fragmentos de cometa para devolver la paz al mundo y salvar a la princesa Peach que una vez más ha sido secuestrada.
Paper Mario Sticker Star, según nos contaron y pudimos comprobar por nosotros mismos después con el juego en las manos, sigue siendo un juego de rol al estilo de Nintendo, es decir, con personajes de la casa que se ríen hasta de su sombra, que cambian incluso ligeramente sus papeles para la historia que, al contrario de lo que sucede en la saga principal tan plataformera ella, aquí sí tiene cierto peso y, sobre todo, siempre se vuelva en el humor que es lo más característico y atractivo para aquellos que se acercan a ella, eso que se les queda grabado más que probablemente los escenarios o los hechos en sí. Uno puede acordarse perfectamente de cómo un pobre hombre borracho se queja delante de una farola de que su mujer le ha echado de casa por ir un poco contentillo de más, aunque luego se olvide de otro tipo de detalles, esto es algo que ya pudimos ver en entregas anteriores de Paper Mario y que, por supuesto, repite.
Es la primera vez que tenemos un Paper Mario en portátil tras haber tenido uno en Nintendo 64, otro en Gamecube y un tercero en Wii, y también la saga se estrena con un pequeño cambio jugable, esta vez nuestro Mario no subirá de nivel, sino que irá consiguiendo corazones de vez en cuando (como si de Link de los Zelda se tratase) para ir teniendo así más puntos de salud, aunque sus ataques siempre dependerán de las pegatinas que lleve pegadas en su álbum, un librillo en el que iremos teniendo más páginas para llevar así más armas con nosotros ya que además aunque cada una sea de un único uso, no todas ocupan el mismo espacio en las páginas.
Como podréis imaginar, el quedarse sin pegatinas implica no poder atacar a ningún bicho, así que en caso de que eso suceda no nos quedará otra que intentar escapar de todos los bichos que veamos mientras que hacemos acopio de pegatinas que encontremos por el escenario o también podremos comprar unas cuantas con las monedas que llevemos encima, y para eso nos tocará volver al pueblo donde comienza esta historia que es como el nexo y el área de descanso antes de cada fase.