Entrevistamos a dos directores de dos estudios valencianos en iDéame

SP: ¿Qué opináis del estado actual de la industria del videojuego en España?

Paco: Yo creo que está bien y que hace tiempo que está bien, pero bien desde la base creativa y de las ganas de la gente y de los equipos. Creo que el problema -que es global, pero a lo mejor en España está más acentuado- es más del tipo económico. En España no hay ayudas y hoy en día ni de bancos ni de inversores, entonces las pocas iniciativas que pueden materializarse son por la inversión de los socios. Y para algo en lo que necesitas mucho dinero, es complicado. Ahí está el problema. Aparte, España arrastra un déficit de industria desde hace muchos años respecto a otros países, así que si unimos ese déficit industrial con que falta cultura de videojuegos, formación… y que no hay capital en el mercado, está todo muy complicado. Pero sí hay buenas ideas, gente con ganas, gente con mucha cualidad que incluso se han tenido que ir fuera.

Jose: Yo viniendo de Japón, es como si estuviera comparando cuando ellos estaban todavía en alza, así que ver lo nuestro y compararlo con lo que conozco es como si aquí no hubiera nada, porque somos tres realmente. Lo que dice Paco de las ayudas también es cierto, y cuando conocemos aquí en el iDéame a muchos desarrolladores europeos, que son chavales de 19 o 20 años y que ya tienen su propia empresa y su juego funcionando, siempre nos dicen que el estado les ha subvencionado todo, que no les coge dinero de royalties y que tienen un apoyo que para nosotros sería como de ficción. Nosotros si queremos hacer algo, tiene que ser a pulso. Hay que montar la empresa sacando los ahorros del banco, toca pagar una factura detrás de otra para cada equipo que compremos o los alquileres de lo que necesitemos, las pocas ayudas que podremos recibir son préstamos hipotecarios y tienes que avalar con pertenencias tuyas o de tu familia, así que como fracases… todo eso hace que la creatividad y la ilusión te estrangulen un poco, porque una cosa es decir que vas a hacer algo y otra ya pensar que como lo hagas mal te quedes sin casa, por eso no te queda otra que sacar algo rápido que parezca fácil y que estés seguro de que vaya a vender. Todo esto hace que nos quedemos un poco estancados. Ojalá tuviéramos más ayuda.

SP: ¿Creéis que unir de algun modo las empresas de videojuegos independientes españolas en una especie de red de manera global sería bueno y que así la gente conocería mejor esta industria de entretenimiento?

Jose: Lo que mueve un país son las empresas, especialmente las pequeñas empresas, entonces cualquier cosa que haga que se cree una red de pequeñas empresas innovadoras, punteras… sobre cualquier cosa, aunque no sean videojuegos, siempre va a ser bueno para el país. Si ahora mismo se tuviera la posibilidad de crear algo que en no demasiado tiempo -cinco o diez años- pudieran crear una red, sería muy provechoso y más teniendo en cuenta que hacemos juegos para exportar a todas partes.

Paco: Yo creo que el problema de España está desde la raíz. El problema es que no hay industria ni cultura del videojuego aquí y entonces a la gente de por la calle todo esto del videojuego aún le suena muy raro, que no jugar porque ven a los niños, sino el que se pueda ganar dinero. En otros países sí que llevan años con una industria consolidada y hasta el gobierno sabe que eso da dinero y que ayuda a un país, pero en España no. Partiendo desde el usuario base hasta los organismos y todo, es que no se tiene la concepción de que con videojuegos uno pueda ganar dinero y que somos capaces de mover mucho dinero, así que falta eso para invertir más.

Jose: Es raro, porque todo el mundo sabe que la industria del videojuego es como la de Hollywood, que factura unas burradas impresionantes.