Partida plus.
Tanto si sacamos el final malo como si nos hacemos con el bueno, tendremos derecho a una partida plus y junto con ello a un modo de juego sin fin o a uno de supervivencia hasta que se nos acaben los fondos.
Hay que tener en cuenta que todo influye para nuestro éxito, desde la colocación de las mesas, hasta los tapetes, alfombras y papeles de pared que escojamos poner, sin olvidarnos de poner siempre cosas interesantes en el escaparate, que es lo primero que verán los clientes desde la calle y que les hará entrar o quedarse fuera.
En la partida plus, se nos guarda todo lo que ya teníamos de antes. La tienda ampliada, los objetos que tuviéramos desbloqueados, el nivel de mercader junto con sus ventajas, los objetos… pero no el dinero, de modo que lo mejor que podemos hacer en la última semana antes de pagar el último recibo es gastar todo lo posible en objetos para tenerlos en la siguiente partida ya para usarlos.
El juego es muy adictivo y desde luego uno se engancha de manera que lo rejuega una y otra vez sin darse cuenta y siempre se puede hacer todo además de una manera diferente a la anterior a la par que sigue subiendo niveles de mercader o que desbloquea más mazmorras y consigue todas las cartas de cazarrecompensas habidas y por haber.
8,5
Conclusiones:
Recettear es un juego muy divertido que mezcla el género action rpg con el poseer un pequeño negocio y sacarle tajada a la especulación tanteando a los clientes y regateando con ellos un precio por cada objeto.
Siempre escogeremos qué tener en la tienda, cómo tenerla montada y decorada, qué hacer cada día y en cada una de las horas de la jornada laboral y además se nos irá premiando por nuestro buen hacer. Los comentarios de los diferentes personajes son también resultones.
Sin duda, es un buen título indie muy simpático que puede agradar a cualquiera y que está hecho tanto para partidas cortas -se puede guardar prácticamente en cualquier momento- como para sesiones largas.
2 Respuestas a “(Análisis) Recettear”