En el modo historia podremos elegir a cualquiera de las cuatro dinastías disponibles en el juego y ver la historia de los tres reinos desde su punto de vista luchando batalla a batalla con miembros de esa dinastía. Las cuatro que podremos controlar son: Wei, Wu y Shu, principales protagonistas de las historia de los tres reinos, y Jin que pone fin a esa era y reunifica China. Por esta razón al elegir esta dinastía el juego te recomienda haber terminado el modo historia con las otras para conocer mejor su origen.
Un sistema de juego eficaz.
Una de las cosas más criticadas en la saga Dynasty Warriors es su sistema de juego, cuya esencia no ha variado a lo largo de los últimos 11 años, pero también es cierto que este sistema de juego es la esencia de la saga y lo que hace que sea un éxito tanto en su lugar de origen como en occidente.
Como ya hemos dicho el sistema de batalla es similar al de los otros Dynasty Warriors, la meta consiste en completar las distintas misiones que se nos presentan en cada batalla acabando con el mayor número de enemigos posible y que serán distintas dependiendo de las decisiones que tomemos a lo largo de ella.
A pesar de que en todas las batallas iremos acompañados de nuestro ejercito y de determinados lideres de nuestra facción, que en ocasiones deberemos proteger, el peso de la victoria recaerá sobre nuestros hombros ya que no servirán de demasiada ayuda haciendo valer el Ikkitousen (literalmente uno contra mil) que es la esencia del juego.
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