(Análisis) Zombie Apocalypse: Never die Alone

Cazando zombis.

Tenemos diez niveles diferentes, todos ellos con muchísimos zombis que además los hay de distintos tipos, pudiendo algunos explotar, ralentizarnos o, en definitiva, hacer un montón de cosas que nos den por saco para que sean ellos los que nos maten a nosotros y no al revés.

Siempre, tanto si jugamos de uno como si lo hacemos con algún amigo, habrá cuatro humanos en el pequeño escuadrón y cada uno de ellos lucha de una manera. También, si no estamos jugando cuatro a la vez, podemos ir intercambiando nuestro personaje por cualquier otro que esté libre o, cuando muramos, directamente pasaremos a uno que nadie controle, para intentar espabilar a quien haya caído en combate, antes de que todos estén debilitados por completo y mueran, en cuyo caso tendríamos un Game Over.

La historia es la misma jugando de uno que en multijugador, y los niveles que podamos subir de una manera, no quedan reflejados en la otra. Porque sí, subimos niveles para ser un poco más capaces, pero se hace de una manera un poco extraña. Para subir un nivel, a partir de cierto momento pone por ejemplo que hemos subido nuestra velocidad, aunque en realidad lo que sucede es que si nos pasamos esa pantalla y tenemos dinero suficiente, podremos pagar por esa subida de nivel que estará ya ahí a partir de la siguiente fase. Y si queremos subir rápido, no nos queda otra que intentar cumplir los objetivos de cada fase que suelen ser pasarse todo en un tiempo en concreto o por debajo de ése, hacer una cadena enorme de zombis que mueren, conseguir un mínimo de puntos, lograr que ni te toquen, rescatar a varias personas…

2 Respuestas a “(Análisis) Zombie Apocalypse: Never die Alone”

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.